Reunión con los novatos de SL.

Había explorado lugares inhóspitos, experimentado con la geometría en diferentes SandBox y bailado en discotecas y playas rodeado de gente que se comunicaba en idiomas que no entiendo. Después de todo esto llegué a la conclusión de que era hora de socializarme en este curioso mundo de Second Life.

Para tal propósito me trasladé a la isla dónde se encuentra Second Life Spain allí se produce una reunión semanal los jueves a la noche en una sala preparada para conferencias, charlas y demás eventos en la que los novatos somos atendidos por gente con experiencia en este mundo virtual resolviéndonos todas las dudas que se nos ocurra plantear (siempre que estén al alcance de su conocimiento).

Como suele ser habitual en mí llegué tarde a la reunión y algo que me llamó la atención fue el clima ameno en el que se estaba desarrollando todo y la cantidad de avatares que estábamos reunidos, se usaba el chat de voz, cosa que en lo que se refiere a mi experiencia no es muy habitual en SL, sobre todo lo usaba la persona que nos estaba atendiendo, a los demás nos recomendaba usar el teclado para que no hubiese confusión al hablar varios a la vez.

Tras las habituales preguntas sobre lindens, construir casas, conseguir empleo, que si no está un poco loca la gente que “vive” esta otra vida con demasiado entusiasmo, y antes de concluir la reunión el hombre que nos atendía nos contó cosas sobre su experiencia personal en SL, las amistades que había hecho la rabia que daba cuando alguien muy habitual en su círculo dejaba de conectarse, …

Lo había logrado por fin había participado en varias conversaciones con mis semejantes en este mundo paralelo, satisfecho por mi participación me agencié una camiseta de Second Life Spain de recuerdo y salí de este mundo virtual ya que necesitaba dormir un poco en el mundo real.

El futuro de los mundos virtuales

Ayer leía en Vida Extra un interesante artículo sobre los mundos virtuales, segundo el cual, en un estudio de la consultora Gartner, el 90% de los mundos virtuales no durará más de 18 meses.

En el artículo, que podeis leer aquí, se clarifica lo que este estudio considera será el futuro de los mundos virtuales.

Personalmente, a pesar de la información me parece interesante, no concuerdo con el estudio. Pienso que el tiempo de vida de los mundos virtuales se reducirá drásticamente debido a la proliferación de los mismos, muchos de los cuales no alcanzarán el éxito necesario para pervivir, pero 18 meses es un tiempo de vida excesivamente corto. Aún así, una vez pasada la época de mayor eclosión, la balanza entre aparición y desaparición de MV tenderá a equilibrarse; como ya ha ocurrido en otras ocasiones con elementos tecnológicos parecidos.

Los MV que hayan alcanzado una situación de éxito, si se gestionan y actualizan adecuadamente, se mantendrán en liza mucho tiempo, los que no, estarán avocados a una "muerte" prematura.

Además, se incide en que las grandes corporativas tendrán mundos virtuales propios, lo cual es posible, pero, en mi opinión poco factible. Las propiedades que permite Second Life, como MV generalista de mayor éxito, a día de hoy, hace más rentable para las grandes empresas introducirse en este MV (a muy bajo coste) y poder utilizarlo como mejor se adapte a sus necesidades. Sólo ante necesidades específicas que Second Life, u otros MV, no puedan responder, será útil la creación de nuevos MV.

Negociando con mi "yo" digital

"Cuando se dice que el dinero no hace la felicidad se alude, evidentemente, al de los demas" (Sacha Guitry, dramaturgo y actor francés).

En esta ocasión hablaré sobre el dinero electrónico y su aplicación en los mundos virtuales, esencialmente Second Life.

Todos sabemos que el dinero es un trozo de papel o de metal que representa de forma abstracta un valor. El dinero electrónico, en vez de emplear esos soportes, emplea bits. Su circulación se lleva a cabo por medio de transferencias electrónicas de fondos, un sistema a priori seguro y versátil, pero que debe llevar aparejada una confianza, una seguridad tanto técnica como jurídica.

Hasta que surgió Second Life la aplicación práctica del dinero electrónico se reducía prácticamente a la sustitución del soporte papel o metal por el plástico de una tarjeta bancaria, ya fuese de crédito, débito o prepago. Con la creación de un mundo virtual alternativo, se impuso la necesidad de incorporar una moneda con la que los usuarios pudiesen realizar transacciones dentro de esa comunidad.

A diferencia de lo que ocurre con otros populares sistemas de pago como PayPal, denominado en dólares americanos, y que facilita las transferencias electrónicas, la moneda de Second Life, el dolar linden, sirve como unidad de cuenta y fluctúa como cualquier moneda del mundo "real". Incluso es factible cambiar dólares linden por su equivalente en dinero real. De esta manera, cualquier usuario puede abrir un negocio en Second Life y ganarse un sobresueldo. Lo más lógico es que no nos saque de la pobreza y el mileurismo, pero al menos la posibilidad está ahí para quien la quiera y pueda explotar.

Lo que sí está claro es que la distancia entre la realidad y la virtualidad cada vez es más corta. Eje mplos como este son bastante clarificadores y nos deben hacer pensar si realmente vamos hacia un mundo en el que la tecnología esté a nuestro servicio o nos acabe dominando y engullendo.